Ads 468x60px

lunes, agosto 23, 2010

KFC hace enojar a sus franquiciatarios

En días pasados The Washington Post publicó una nota referente a la controversia suscitada entre una de las franquicias más conocidas a nivel mundial y sus franquicitarios. Me refiero a Kentucky Fried Chicken.

En la última década las tendencias sociales hacia productos más saludables han llevado a los consumidores a evitar productos menos sanos, como la comida rápida o las frituras, entre otros. Asimismo, las empresas buscando responder a la nueva demanda han buscado opciones que les permitan sobrevivir en un mercado de ese tipo. El origen de la inconformidad parte de este hecho, pues KFC ha encontrado su fórmula saludable en el pollo a la parrilla que según distintos grupos, ha desvinculado la esencia de la marca con su oferta original. Quienes opinan en contra se encuentra precisamente los franquiciatarios de la cadena, quienes ven en este nuevo producto, el desdibujo de la firma. Además, la empresa ha agraviado aún más a sus “asociados” al enfocar sus últimos esfuerzos promocionales sólo en el pollo a la parrilla antes que en el tradicional pollo frito, enfureciendo rápidamente a propios y extraños ante la nada extraña posibilidad de convertir un icono de la nación americana en un mero recuerdo, de transformar KFC a KGC (Kentucky Grilled Chicken).

Por supuesto las reacciones han sido encontradas porque mientras hay quien dice que KFC necesitaba diversificar sus líneas de productos, hay quienes indican con cifras en mano que “una cosa es lo que los americanos dicen que se debe comer y otra lo que comen”, echando por tierra cualquier argumento de la empresa respecto a una disminución a futuro de su presencia en el mercado si continuaba por el camino anterior.

Lo cierto es que este cambio de estrategia le ha valido a KFC un incremento sustancial en sus ventas así como su inserción a mercados que antes del nuevo menú resultaban impensables. Sin embargo, eso no es todo. Una última verdad cierra el círculo de hechos: Con o sin políticas nacionales de alimentos sanos, el tradicional pollo Kentucky sigue vendiéndose, demostrando que una vez más, los consumidores mandan. De ahí, que escucharlos, sea mandatorio.



Fuente: The Washington Post.

0 comentarios: